Llevo años trabajando con mujeres que sienten que su cuerpo ha cambiado y que, por mucho que se esfuercen, no logran los resultados que esperan. Yo también he vivido esa sensación de frustración: el cuerpo no responde igual que a los 25, las prioridades cambian y el tiempo disponible es cada vez más escaso.
Pero quiero que sepas algo: no estás sola. Y no, no es culpa tuya. Entender los motivos detrás de este “por qué no adelgazo” es el primer paso para avanzar y empezar a cuidarte desde el conocimiento, no desde el castigo.
¿Por qué no adelgazo si hago dieta y ejercicio?
Lo primero que hay que entender es que el cuerpo cambia con los años. A partir de los 40, nuestro metabolismo tiende a ralentizarse y empiezan a influir factores que antes apenas notábamos. Según la Mayo Clinic, el gasto energético disminuye con la edad por la pérdida progresiva de masa muscular y cambios hormonales, sobre todo en mujeres.
Además, no puedes plantearte por qué no adelgazo sin contar con factores como el estrés, la falta de sueño, la resistencia a la insulina, el hipotiroidismo o incluso el exceso de restricciones calóricas, que pueden dificultar la pérdida de peso. Es decir, no siempre se trata solo de “comer menos y moverse más”.
El papel de las hormonas: por qué influyen tanto a partir de los 40
A partir de los 40, las mujeres empezamos a notar cambios importantes a nivel hormonal. La perimenopausia y la menopausia provocan fluctuaciones en estrógenos y progesterona que pueden afectar al metabolismo, la distribución de la grasa corporal y el apetito. Por ejemplo, es habitual que la grasa tienda a acumularse más en la zona abdominal y que la respuesta al ejercicio y la dieta sea más lenta.
Además, desequilibrios como el hipotiroidismo o la resistencia a la insulina pueden aparecer en esta etapa, haciendo aún más difícil la eterna pregunta de por qué no adelgazo.
Si sospechas que hay algo más allá de lo “normal”, como fatiga excesiva, caídas de pelo o cambios bruscos de ánimo, consulta con tu médico. Un simple análisis puede ayudarte a descartar problemas y personalizar tu estrategia. Recuerda: no es solo una cuestión de fuerza de voluntad, muchas veces es biología.
Errores comunes: lo que muchas veces no te cuentan
Muchas mujeres piensan que para adelgazar hay que hacer más cardio, comer menos o incluso saltarse comidas. Sin embargo, estos hábitos pueden provocar el efecto contrario:
- Déficit calórico excesivo: comer demasiado poco puede ralentizar aún más tu metabolismo y provocar que el cuerpo “ahorre” energía. A veces, aumentar ligeramente las calorías y repartirlas mejor durante el día es la clave para reactivar la pérdida de peso.
- Falta de entrenamiento de fuerza: el músculo es el tejido más activo metabólicamente. Si solo haces cardio y no entrenas fuerza, estarás perdiendo músculo y tu cuerpo gastará menos calorías en reposo.
- No controlar el estrés y el descanso: el estrés crónico y la falta de sueño aumentan los niveles de cortisol, lo que puede favorecer la acumulación de grasa abdominal y dificultar la pérdida de peso (Harvard School of Public Health).
- Expectativas poco realistas: a veces estamos perdiendo grasa pero no lo vemos reflejado en la báscula porque retenemos líquidos, ganamos músculo o simplemente el proceso es más lento de lo que nos gustaría. El cuerpo no responde igual a los 25 que a los 45, y eso es normal.
Desmontando mitos: lo que no te cuentan sobre adelgazar
Hay muchas creencias equivocadas que nos complican la vida cuando intentamos saber por qué no adelgazo. Algunas de las que más escucho (y veo en redes sociales) son:
- “Si como muy poco, adelgazaré antes.” Error: si reduces demasiado las calorías, tu cuerpo entra en “modo ahorro” y ralentiza el metabolismo. Es mejor una reducción moderada y sostenible.
- “Solo con cardio conseguiré bajar de peso.” El cardio es importante para la salud, pero sin trabajo de fuerza, no conseguirás mantener tu masa muscular, que es lo que realmente ayuda a quemar calorías en reposo.
- “Los productos light o dietéticos me ayudarán.” No necesariamente. Muchos sustituyen el azúcar por edulcorantes o añaden ingredientes que no siempre son saludables. Lo mejor es una alimentación lo más natural y variada posible.
- “A mi edad ya es imposible perder peso.” Falso. Es cierto que cuesta más, pero con constancia, un plan personalizado y buenos hábitos, es totalmente posible. No te rindas antes de empezar.
Por eso, lo fundamental es informarse, buscar asesoramiento profesional y no caer en modas que prometen resultados rápidos y milagrosos. Recuerda que tu salud siempre es lo primero.
Por qué no adelgazo, la importancia de personalizar
Una de las cosas más importantes que he aprendido es que no existen soluciones universales.
Hay quienes responden bien a ciertas pautas y quienes necesitan un enfoque diferente. Por eso, mi recomendación es siempre buscar asesoramiento profesional: nutricionista, endocrino o entrenador/a especializado. Consulta siempre con un profesional de la salud antes de hacer cambios fundamentales en tu rutina.
¿Qué puedo hacer para desbloquear mi peso?
Si te ves reflejada en esta situación, te comparto algunas claves que he visto funcionar en mujeres a partir de los 40 con el «por qué no adelgazo» en la cabeza:
- Prioriza el entrenamiento de fuerza: incorpora rutinas con mancuernas o peso corporal al menos tres veces por semana. No necesitas horas de gimnasio, pero sí constancia.
- No temas a las calorías: comer bien no es comer menos. Asegúrate de ingerir suficientes proteínas, grasas saludables y carbohidratos de calidad.
- Revisa el descanso y la gestión del estrés: dormir entre 7-8 horas y practicar técnicas de relajación puede marcar la diferencia.
- Controla tu salud hormonal: si notas fatiga, cambios de humor o ciclo irregular, acude a tu médico para descartar alteraciones como hipotiroidismo o menopausia prematura.
- Paciencia y seguimiento: el progreso real lleva tiempo. Hazte fotos, mide tu ropa y revisa tus sensaciones más allá del peso.
¿Cómo puede ayudarte el entrenamiento online?
Si sientes que sola te cuesta mantener la motivación o no sabes cómo adaptar tus rutinas a tu edad y circunstancias, el entrenamiento online puede ser tu mejor aliado. No tienes que desplazarte, puedes entrenar desde casa y todo está adaptado a tus objetivos y necesidades. Yo te ayudo a crear un plan personalizado, a revisar tus hábitos y a resolver dudas para que dejes de dar palos de ciego y empieces a ver resultados reales (sin obsesiones ni prohibiciones).
¿Quieres que te ayude a dar el siguiente paso? Escríbeme y te cuento cómo trabajo. Juntas encontraremos la mejor manera de cuidarte y alcanzar tus metas.
Preguntas frecuentes sobre por qué no adelgazo
- ¿Por qué no pierdo peso aunque hago dieta y ejercicio? Puede deberse a múltiples factores: metabolismo más lento, falta de músculo, estrés, alteraciones hormonales o expectativas poco realistas. No todo es cuestión de calorías.
- ¿Qué hago si estoy a dieta y no pierdo peso? Revisa si tu plan es adecuado para tu edad y estilo de vida. Consulta con un nutricionista o entrenador/a para personalizar tus hábitos.
- ¿Influyen las hormonas en la dificultad para adelgazar? Sí, sobre todo a partir de los 40, cuando empiezan a cambiar los niveles hormonales. Si tienes dudas, consulta siempre con tu médico.
- ¿El entrenamiento online puede ayudarme? Sí, porque permite adaptar los entrenamientos a tu ritmo de vida, evitando excusas y recibiendo un seguimiento profesional sin salir de casa.
Recuerda: cada cuerpo es diferente y la salud está por encima de cualquier número. Consulta siempre con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier cambio importante.